Son momentos de crisis, pero si no sigo escribiendo más me entristeceré y peor aun, me oxidaré.
Dicen que para querer hay que quererse a uno mismo primero. La confianza es una de las bases primordiales de todas las relaciones sociales, se podría decir que es lo que las mantiene vivas. Así que considerando que las personas tienen (o deberían tener) un contacto consigo mismos, deberíamos confiar en nosotros mismos!
Bueno, quizás no tengan charlas existenciales con ustedes mismos (como suelo hacerlo) pero estoy casi seguro que cada cosa que hacen en sus vidas es pensada y analizada rigurosamente en unos segundos... Y como no hay nadie más que tenga la culpa de nuestras acciones, yo creo que estaría bien que mínimo y máximo nosotros estuviésemos de acuerdo con lo que hacemos, que creyéramos en que podemos hacerlo, porque las actitudes negativas nos llevan a resultados negativos.
Y es que la mayoría de las personas van por ahí dudando de sus decisiones e inclusive por esas mismas dudas dejan pasar muchas oportunidades... Nunca vamos a tener completa certidumbre de lo que hacemos, porque es un universo complejo y cambiante... Pero mínimo tenemos que estar seguros de lo que nosotros hacemos, de no ser así en manos de quién queda nuestro destino nuestro destino.
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