Mi estado de Animo del dia

Chaos! Fixing everything!

sábado, febrero 01, 2014

Mensajería instantánea no tan instantánea

Uno de esos nuevos paradigmas de la comunicación es que la tecnología actual nos permite enviarnos mensajes y en una increíblemente corta y absurda cantidad de tiempo es enviado y recibido casi instantáneamente. Bueno, eso es lo positivo...
Estoy casi seguro que de un tiempo para acá he escrito más palabras en aparatos electrónicos que las que digo con mi melodiosa voz. Y no es tan grave si lo tomamos como: Al menos tiene una forma de estar en contacto con las demás personas. Sin embargo, la interacción es completamente diferente...

Alguna de esas maravillosas lecturas de Internet me llevo a darme cuenta de lo mal que es todo este asunto de la comunicación instantánea electrónica. Hay unos cuantos puntos clave que debemos tomar en cuenta:

1 El texto no denota emociones. Si de por si es complicado para las personas encontrarle sentido a la entonación que se utiliza al hablar, leer un texto es un completo vacío emocional que siempre se presta a mal interpretaciones dado que le podemos dar la coherencia que queramos, porque estamos muy mal acostumbrados a sobreentender las cosas de una cierta forma (y peor las mentes cerradas). No es tan grave cuando en múltiples ocasiones hemos tenido contacto con la persona del otro lado, digo así es muy fácil entender sarcasmos, ironías, enojos, tristezas y alegrías. A pesar de la evolución de las interjecciones, muchas personas siguen escribiendo mensajes sin siquiera intentar transmitir una misera emoción.

2 Hablamos pensando. ¿Eso es malo? En realidad es una de las recomendaciones que siempre se nos ha hecho, muy pocos lo consideran (o piensan muy lento). Pero resulta muy curioso que cuando estamos escribiendo las palabras llegan a nuestra cabeza antes de ser plasmadas. Y si lo piensas tiene mucho sentido, no puedes simular sonidos en la mente mientras hablas. Pero cuando escribes si puedes escuchar las palabras antes de escribirlas o inclusive cantar mientras escribes otra cosa totalmente diferente. Claro que el verdadero problema está cuando no solo no escribimos al instante, si no que además nos tomamos nuestro tiempo para escribir. Qué dilema! Qué decir! Si el flujo de palabras de por si es complicado al momento en que se escribe imagínense si además agregas el tiempo que te tomas en tener clara la idea que quieres transmitir!

3 Se pierde la interacción humana. Más allá de no mostrar emociones y dar la idea correcta a la conversación aún queda perdido ese elemento tradicional. Uno no le habla a las personas nuevas porque siente miedo de lo que podría decir esa otra persona. Uno no siente la misma chispa cuando habla con una persona que le parece interesante... Porque no estás viendo a esa persona. El simple hecho de estar en presencia de una persona aún si no hay comunicación genera una gran diferencia entre la llana y vacía comunicación electrónica. Eso no te genera miedo, satisfacción, compañía. Nada de eso, simplemente es como hablar con un chat virtual preprogramado... Imagínense, ni siquiera sabes quién contesta? Eso es mucha incomodidad.

4 Recibes pero no por ello envías. Con múltiples y cada vez más complejas excusas la gente tiene el descaro de destruir por completo el círculo de la comunicación atendiendo a la respuesta natural de una persona sin sentimientos: Ignorar. Pero es muy fácil faltar el respeto a las personas en un medio electrónico, a pesar de que la tecnología siempre ha mostrado cunado la persona está presente. Es evidente que después de unas cuantas horas (y eso es con bastante paciencia) y no tener una respuesta, oficialmente has sido ignorado.

Siendo yo una persona obsesiva compulsiva, un escritor barato y un amante de la tecnología, creo que tengo todo el derecho de criticar a las personas que hacen un mal uso de las comunicaciones instantáneas. Y no es como si yo nunca hubiese hecho mal, podría decirse que yo soy una de las peores personas que existe sobre la faz del Internet. Pero esto es para que las personas no sean como yo.

Partimos de ese punto 4, como les dije mi obsesión no me permite dejar una conversación a medias hasta me molesta las frases no terminadas o las ideas no conectadas. Es como herejía de la comunicación. No entiendo como existe gente tan desalmada que puede ignorar cortos párrafos llenos de ideas poco profundas. Me parece de lo más desagradable y ruin, y lo volvería a hacer si pudiera en cada ocasión que no quiero crear conversaciones. Pero entonces viene el problema de que si yo lo hago para evitar comenzar el círculo de la comunicación. Entonces muchas personas deben odiarme, cómo es posible que dejen cosas sin contestar, es inaudito, cruel y deplorable. No lo hagan por favor, algunas personas obsesivas tienen sentimientos, contesten en cada ocasión que puedan.

A pesar de que mi zona de confort está vinculada casi por completo con este mundo virtual y estos medios tan fáciles para comunicarse, siempre he preferido el contacto humano. Y me gustaría aclarar en este punto que no por ello todas mis conversaciones preferiría realizarlas en vivo (digo, si ya aclaré que ignoro conversaciones, creo que queda claro que no todas las convivencias son bienvenidas). Nada como la expresión corporal y la sensación de la presencia de las personas. No hay forma de que se iguale eso, aún con las videollamadas la presencia siempre deja una sensación diferente... Seguro hay más química y cosas mentales de por medio.